Cuando te miras al espejo y te ves con unos kilos de más, inmediatamente te vas al gimnasio a apuntarte para bajar peso. Lo mismo ocurre cuando ves que tienes raíces blancas y llamas a la peluquería. ¿Y qué pasa cuando te miras al espejo, abres la boca y ves que tienes sarro o los dientes sucios? Pues seguro que pasar del tema. Pues bien, esto provoca importantes enfermedades, y no solo hablamos de la boca, también de otras partes del cuerpo.